Así fue cómo se le nombró al show de Porter en Ciudad de México, quienes se presentaron en este venue por primera vez en su carrera
✍️ Brandon Díaz 📸 Karla Bretón y OCESA
Muchas veces siento que Porter, a pesar de su trayectoria y de cómo resurgieron después de la salida de Juan Son, es una banda que el publico mexicano no valora en su totalidad. Quizá estoy exagerando, pero ver un Palacio de los Deportes con las gradas de arriba cubiertas es algo que me agüitó un poco ¿Por qué la gente no viene a verlos si es una banda mexicana emblemática de principio de los dos mil? Ok, a muchos aún les sigue pareciendo que la banda terminó después de su regreso en aquel Vive Latino 2013, pero para mí el disco Moctezuma (2014) demostró una vez más que Porter es todo un conjunto, no una voz.
En fin, moverse por la ciudad es algo complicado y más cuando hay dos conciertos en la misma zona, motivo por el cual no llegué a ver a Renee, acto abridor de lo que sería una noche mágica más para Porter que arrancaba con ¿Qué Es El Amor?, Murciélago y Rincón Yucateco, canciones que formarían parte de la inolvidable velada que nos prometieron en conferencia de prensa; sería el concierto en el cual repasarían muchas de las canciones antañas de la banda, dando paso a No Te Encuentro
Para mí, Moctezuma es uno de los mejores discos del rock en español, por lo cual es un deleite escuchar canciones cómo La China y Tzunami, que fueron muy bien acompañadas por las pantallas detrás de la banda que simulaban una pirámide, agregando el espectáculo visual y de luces que nos adentraban más al Mundo Extraño de Porter.
¿Qué decir de Host Of A Ghost? Un clásico de la banda que sonaba cerca de la mitad del show. Aquí recordé aquella promesa del repaso a las primeras canciones de Porter. Me gusta mucho la etapa actual de la banda, pero quizá muchos de los que estábamos en el Palacio de los Deportes esperamos canciones cómo Hansel & Gretel’s, Cuervos, Girl o Kiosko, las cuales no aparecieron. Fue sorpresa que se aventaran Bipolar, misma que llegó después de Arcade y Cuxillo.
Después de una pequeña pausa del show, el set acústico llegó con Cuando Lloro y La Sombra del Amor para minutos más tarde abrir el acto donde Porter tendría a sus invitados especiales en el escenario ¿Sabías que Caloncho audicionó para ser vocalista de Porter antes de la llegada de David? Bueno, pues algunos tuvieron una probadita de como hubiera sonado de haberse concretado. Y digo algunos porque el audio del Palacio de los Deportes desde la zona donde estábamos era muy malo, un problema recurrente del venue pero que esta vez el mismo David ofreció disculpas por las fallas técnicas, las cuales si hubo a lo largo del concierto (ojalá nadie se haya quedado sin empleo a causa de esto).
Dejemos de lado el único problema del show y sigamos con los invitados. Desde muy temprano la gente andaba gritando ¡Xolo! ¡Xolo! ¡Xolo! y finalmente llegaba el momento de escuchar Xoloitzcuintle Chicloso en compañía de Renee. Personalmente no me gustó esta versión, aún así decidí disfrutar una de mis canciones favoritas ¿Me estaré convirtiendo en el que vas a saber de rock chamaco pendej@? Qué miedo.
El Palacio se iluminaba con las luces de los celulares, tal cual cómo si fuéramos ese Vaquero Galáctico viajando a través del universo pasando muy cerca de las estrellas, y qué mejor que con la voz de Denise Gutiérrez para emprender esta aventura que culminaría con todo el venue cantando uno de los himnos de la banda. Hablando de himnos, Himno Eterno también fue uno de los momentos más lindos de la noche, dedicando la canción a la gente que ya no se encuentra en este plano terrenal junto a nosotros.
Cachito De Galaxia y Pájaros se han convertido en canciones de Porter que tampoco pueden faltar en un show, mismas con las cuales nos perfilábamos a la recta final de la noche no sin antes tener a Rosas junto a la banda cantando Para Ya. David dijo que era la reencarnación del mismísimo Juan Gabriel y vaya que tenía razón, en serio pensé que estaba escuchando al Divo de Juárez junto a Porter.
¡Creo que ahora si me estoy volviendo looooco, looooco, looooco! los vasos empezaban a volar por todo el Palacio de los Deportes en el cierre de Espiral, donde tuvimos a Little Jesus junto a Porter para finalizar una noche más de conciertos en el Domo de Cobre, el cual por un momento del show fue llamado Palacio de los de Porter.
Cómo mencioné al principio, creo que no se dimensiona la calidad de banda que tenemos activa en México, estos son shows en los que realmente esperaba ver un lleno total y más en un Palacio de los Deportes. A final de cuentas Porter, con todo y fallas técnicas que no quedaron en mano de los músicos, cumplió con su cometido en Ciudad de México.
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