El ‘Coloso de Reforma’ recibió de nueva cuenta en su escenario a Caifanes para realizar la primera de sus dos fechas
Fotos y texto: Brandon Díaz
No fue un viernes cualquiera en la Ciudad de México, era uno en el que finalmente tuvimos en gran parte de la capital una lluvia que refrescaba después de la intensa ola de calor que vivimos en estos últimos días. A todo esto, sumemos todos los conciertos que vamos a recibir este fin de semana: Interpol, Madonna y Bruce Dickinson, por mencionar a algunos. Faltaba una banda mexicana que estuviera a la par de la gran cartelera musical que tendremos; no podía ser otra más que Caifanes, quienes regresaron de nueva cuenta al Auditorio Nacional para ofrecer la primera de sus dos noches en el ‘Coloso de Reforma’.
No pude evitar pensar en el famoso meme “¡Pongan Caifanes!” y todo lo que este conlleva al tratarse de una de las bandas mexicanas más importantes de todos los tiempos. A veces me cuesta entender el hate que llegan a recibir con comentarios como “Ahh, otra vez Caifanes en el Vive Latino” pero son los que a la mera hora andan ahí cantando sus rolas. Esta noche no era la ocasión, eran 10,000 almas reunidas para ser testigos de lo que la agrupación liderada por Saúl Hernández tiene aún por ofrecer, y vaya que es bastante.
No Dejes Que fue la rola con la cual abría el ritual en Auditorio Nacional, donde padres y madres cargaban a sus hijos en hombros para que pudieran tener una mejor vista de lo ocurrido en el escenario, una imagen a la cual estamos cada vez más acostumbrados. Viento (canción que me hace creer en el amor) amarraba los corazones de todo el público ante lo que sería una gran velada, una a la cual Caifanes nos tiene acostumbrados.
Con Nubes, Detrás de ti y Debajo de tu Piel continuamos disfrutando de la calidad de Caifanes en el escenario. Cada uno de los miembros tuvo oportunidad de destacar en su debido momento, motivo por el cual los elogios y aplausos de los asistentes no se detenían. En la sección en la que yo estaba parecía que se les olvidaba que esto era una celebración, un momento para disfrutar, ya que dos familias (una con niños) iniciaron una discusión que llegó a unos pocos golpes. Es bien sabido que la seguridad del Auditorio es una de las más estrictas, por lo cual este acto no fue perdonado desalojándolos del recinto.
Caifanes es un grupo que de igual forma alza la voz en contra de las injusticias, por lo cual no faltó un video en el cual destacaba la presencia de Vivir Quintana interpretando Canción Sin Miedo, exigiendo un alto a los feminicidios. Seguido de esto pudimos escuchar Inés, una de las rolas más recientes de Caifanes donde habla de que la protagonista se suicida ¿Recuerdas el título de esta nota? Bueno, Saúl es consciente de la alta tasa de suicidios hechos por jóvenes, muchos menores de edad. A mi parecer fue uno de los momentos más emotivos ya que es un tema que se toca por muy encima de la mesa y claro que es muy bueno ponerlo en una conversación. De esta forma el líder de la banda invitaba a los más jóvenes a seguir soñando, a llegar más lejos de lo que podemos imaginar.
Claro que no podían faltar los clásicos: Mátenme Porque me Muero, Perdí Mi Ojo de Venado, Afuera, Antes de que nos Olviden fueron quizá las rolas más cantadas por el público asistente. Ya en la recta final también pudimos escuchar Te lo Pido Por Favor (mostrándonos un vídeo de Juan Gabriel), La Célula que Explota y La Negra Tomasa.
¿Más de lo mismo? Puede que sí, pero la gente pide y Caifanes les responde como solo ellos saben hacer, no por nada tendrán una fecha en Foro Sol el 31 de agosto y otra en Palacio de los Deportes el 7 de diciembre (ya es sold out). Tenemos Caifanes para rato, y eso está bien.