Y aunque muchas veces la intención es lo que cuenta, creemos que La Plaza de Toros no fue el lugar ideal para este concierto
Texto y fotos: Brandon Díaz – Más fotos: OCESA/Lulú Urdapilleta
El Jardín de las Almas es un espacio de realidades en búsqueda de las respuestas. En este lugar nuestros pensamientos y temores se manifiestan para enfrentarlos, por lo cual solo el valiente y el perseverante logrará encontrar el camino de regreso a casa.
Lunario del Auditorio Nacional, El Plaza Condesa, Teatro Metropólitan, Auditorio Nacional y Palacio de los Deportes ha sido el recorrido de escenarios en Ciudad de México para Camilo Séptimo, banda que tuvo un crecimiento brutal desde 2013 esparciendo su mensaje de amor y paz con referencias al universo a través de sus canciones. Parecía algo arriesgado ir en este momento por un Foro Sol, estoy seguro que en un par de años se dará ese enorme paso, por lo cual esta vez tocó ir a La México a ser testigos del florecer de el Jardín de las Almas, el más reciente disco de Coe, Honas y Erik.
Tras la participación de Moanday y Solo Fernández, finalmente llegaba el turno de Camilo Séptimo, quienes apenas y se dejaron ver debido al contraluz y el exceso de humo durante las primeras canciones. Por cierto, empezamos fuerte con No Confíes En Mí, rola del EP Maya que los dio a conocer por allá de 2014.
Ser Humano, Te Veo En El 27 y Pulso sonaban mientras los últimos fans en llegar tomaban sus lugares en la inmensa Plaza de Toros que fue ocupada a mitad de su capacidad para este espectáculo que, en lo personal, me estaba dando un sabor agridulce.
No dudo de la calidad de músicos que son cada uno de los integrantes de Camilo Séptimo ni de que sus shows son muy buenos, al contrario, creo que ese es uno de los puntos más fuertes del porque lograron escalar tan rápido. Para esta ocasión y coincidiendo con gente de mi alrededor, el audio no era el mejor. Pero ok, quise dejar de lado esta situación enfocándome en los visuales y en el espectáculo de luces que son parte esencial de sus conciertos, mismo que esta vez siento que no estuvo a la altura. Desde que anunciaron este concierto pensé que sería una experiencia 360°, no encontraba otro motivo por el cual eligieron este lugar para presentarse.
En fin, los visuales apenas y se distinguían en las pantallas de los costados junto a las de la parte de atrás que estaban inclinadas, supongo para que la gente de la parte alta de La México los viera con más claridad; el juego de luces creo que fue de lo más rescatable. En fin, cómo sea quería disfrutar de la experiencia a como diera lugar ya que Camilo Séptimo es una de mis bandas nacionales favoritas, por lo cual agradecí demasiado poder escuchar canciones antañas cómo la de Portales.
Claro que el enfoque del show era presentar Jardín de las Almas, álbum con el cual la banda abriría una nueva etapa para su primera década de trayectoria. La escenografía de este show también me gustó mucho, pero volviendo a lo anteriormente mencionado, no pudo ser apreciada en su totalidad por todos los asistentes. Pensaba en como se pudo haber visto regresando a un Auditorio Nacional o incluso regresar al Palacio de los Deportes pero en formato 360°, hubiera lucido fantástico.
Acerca de los invitados Samantha Barrón apareció para Ciclones, No Te Puedo Olvidar fue en compañía de María de Disco Bahía, Cerca junto a Solo Fernández y Holográfico junto a Moanday. Por cierto, Camilo Séptimo también se aventó un cover de Luis Miguel cantando Culpable O No. Puedes escucharla en buena calidad en su Amazessions.
Los Navegantes hicieron Contacto con la sintonía de Camilo Séptimo, quienes finalizaron una de las noches más importantes en su carrera con Eco, Eres y Vicio, la cual parece ya es una tradición que sea la más pedida en sus conciertos. No digo que La Plaza de Toros no sea la adecuada para conciertos, al contrario, ya se han hecho muchos ahí que nos han encantado. Sin embargo, para el concepto de Camilo Séptimo, creo que no fue el espacio ideal.
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